, miércoles 24 de junio, festividad de San Juan Bautista, el obispo de Formosa, monseñor José Vicente Conejero, ordenó diácono permanente al acólito Miguel González. El prelado presidió la celebración eucarística de ordenación a las 19 en la parroquia Nuestra Señora del Rosario. González eligió como lema de ordenación el pasaje bíblico “El Espíritu del Señor habla por mi y su palabra está en mí lengua».
Miguel González, curso sus estudios de teología en la Escuela Pastoral y Ministerial San Esteban, de la diócesis de Formosa. Está casado y realiza sus tareas pastorales en la comunidad en la que vive junto con su familia, desde hace varios años.
Ordenado para la caridad, el futuro diácono permanente tendrá que trabajar al servicio de los pobres, los excluidos, los desocupados, quienes levantan sus manos y sus voces hacia la Iglesia, por cuanto, por origen histórico y por ordenación, tendrá una responsabilidad central hacia todos ellos. La caridad, la solidaridad hacia los pobres, la justicia social, son campos de altísima urgencia cuyos desafíos deberá enfrentar.+