Dichoso tú Esteban: que por proclamar tu amor a Cristo
en la tierra te fuiste a acompañarlo a Él en el cielo.
Haz que seamos multitud quienes con
nuestras palabras y buenas obras nos declaremos
amigas y amigos, quienes seguimos a Jesús en esta vida y
le acompañemos también en el gozo eterno del Paraíso.
Amén.