El domingo 25 de febrero, segundo de cuaresma, Mons. Josep Àngel Saiz Meneses ordenó a las 18h en la Catedral en Terrassa cuatro nuevos diáconos permanentes. Se trata de Manuel Abad, Pedro Pardo, Paolo Petrolillo y Eduardo Pire. Concelebraron Mons. Salvador Cristau, Obispo auxiliar, Dom Josep M. Soler, Abad de Montserrat, el Vicario Judicial, Vicarios Episcopales, Secretario General, Rectores y otros sacerdotes. Asistieron un buen número de diáconos permanentes. El templo se llenó de feligreses provenientes de la propia ciudad de Terrassa, de Sabadell, de Barcelona y de Barberà de Vallès, entre otros lugares.
En su homilía el Sr. Obispo reflexionó a partir de las lecturas del domingo segundo de cuaresma, remarcando la importancia del encuentro con el Señor transfigurado a través de la experiencia de la oración, que junto con el ayuno y las obras de misericordia conforman la estructura fundamental de la vida espiritual. Dedicó una parte de la homilía a reflexionar sobre el diaconado y su relación con la Palabra de Dios, que hay que acoger como palabra viva y eficaz y proclamarla sin reduccionismos ni adaptaciones a nuestra comodidad. También hizo mención de la necesidad de la vivencia de las virtudes evangélicas y de la Eucaristía como centro de la vida del cristiano y de la Iglesia. Finalmente invitó a los candidatos a vivir la actitud de servicio con fidelidad a la llamada y dejándose guiar por la Virgen María bajo la advocación de la Salud.