Diaconio, Boletín mensual del Diaconado Permanente – Arquidiócesis de Medellín, Colombia
Nº 67 – febrero de 2010 – Año VII
El pasado 10 de enero, el Papa Benedicto XVI, con motivo de la Fiesta del Bautismo del Señor, explicó que del bautismo se deriva también un nuevo modelo de sociedad: la de los hermanos. Añadió el Papa que “Como cristianos, gracias al Espíritu Santo, recibido en el bautismo, se nos ha dado el don y el compromiso de vivir como hijos de Dios y como hermanos, para ser como “levadura” de una humanidad nueva, solidaria y llena de paz y esperanza”. Este concepto del Papa nos llama a darle un sentido práctico a nuestro compromiso bautismal, por el cual, unidos a la persona de Cristo, nos invita a ser solidarios con los hermanos necesitados.
En estos días estamos viviendo la tragedia de Haití. Es tanta la cantidad de información que se nos presenta por la televisión, la radio y la prensa, que es casi imposible sustraernos a sufrir y a colaborar, de alguna forma, con estos hermanos nuestros que han sufrido este fenómeno de la naturaleza y es muy valioso que podamos identificar que esta adhesión nuestra tiene algo que ver con nuestra condición de bautizados.
También hay tragedias y necesidades en otras partes del mundo, e incluso muy cerca de nosotros. Con frecuencia tenemos familiares nuestros, o vecinos, o compañeros de trabajo, o compañeros del diaconado, que padecen necesidades y no siempre somos solidarios en la medida que realmente podemos.
Al comenzar este año, sería interesante que, como diáconos, tuviéramos en cuenta este planteamiento, del Papa. Actuando en consecuencia, como cristianos solidarios, nuestro ministerio, que se inicia y continúa, teniendo como base nuestro compromiso de bautizados, adquiriría un nuevo matiz.
