En una solemne eucaristía, Luis Araya Padilla y Julio Iglesias Garrido, recibieron su ordenación diaconal y servirán a todos los fieles en la parroquia Nuestra Señora de Fátima.
Acogiendo el llamado de Dios para servir a través del servicio del diaconado, Luis Patricio Araya Padilla y Julio Ángel Iglesias Garrido, en una solemne eucaristía presidida por el obispo de la Diócesis de Santa María de Los Ángeles, Felipe Bacarreza, recibieron su ordenación diaconal.
En la oportunidad, acompañados por sus familiares, amigos e integrantes del Clero Diocesano, Luis Araya y Julio Iglesias, se unieron en este servicio para servir a todos los fieles en aquellas acciones a las que han sido llamados tales como asistencia espiritual, proclamar el Evangelio, celebrar la catequesis, administrar el bautismo, matrimonio y practicar la caridad.
Ante más de 300 personas que se dieron cita en el templo Catedral para participar de esta ordenación, Monseñor Bacarreza, destacó el tiempo de preparación de estos nuevos diáconos, quienes debieron durante tres años estudiar las diversas materias en la Universidad Católica de la Santísima Concepción y preparar su corazón para este hermoso servicio.
Luego de la bendición e imposición de las manos por Monseñor Bacarreza, los nuevos diáconos, recibieron las felicitaciones de todo el Clero y sus familias, y agradecieron a Dios esta oportunidad para servir a todos los católicos de la Diócesis, en especial, a quienes integran la parroquia de Nuestra Señora de Fátima, donde efectuarán su diaconado.
