En este tiempo de adviento, honramos la memoria de nuestra madre María, la Inmaculada.
No podemos entender el misterio de la Encarnación sin la participación de María en quien se encarnó.
Traemos a este día de fiesta mariano las palabras del Papa Pablo VI, en su exhortación apostólica Marialis cultus decía:
“Durante el tiempo de Adviento la liturgia recuerda frecuentemente a la santísima Virgen -aparte de la solemnidad del día 8 de diciembre, en que se celebra conjuntamente la Inmaculada concepción de María, la preparación radical (cf. Is 11,1.10) a la venida del Salvador y el feliz comienzo de la Iglesia sin mancha ni arruga-, sobre todo en los días feriales desde el 17 al 24 de diciembre y, más concretamente, el Domingo anterior a la Navidad, en que hace resonar antiguas voces proféticas sobre la Virgen Madre y el Mesías, y se leen episodios evangélicos relativos al nacimiento inminente de Cristo y del Precursor” (MC, 3).
Oramos en unión en este día especial…
Oración a Nuestra Señora del Adviento
María, madre de los diáconos y sus familias, ruega por nosotros.