dirigidas a los diáconos de América Latina y a sus esposas

Buenos Aires, Argentina, 7 de diciembre de 2011 (CIDAL)

    Su autor, el Diácono Miguel Ángel Herrera Parra, de la Arquidiócesis de Santiago, Chile, y Referente Nacional del CIDAL en ese país, está abocado, junto a un equipo de colaboradores, a la tabulación de la quinta edición (2011) de la encuesta dirigida a los diáconos permanentes latinoamericanos y la primera a las esposas de los casados.

    Los textos de las mismas fueron publicados en la edición n. 82 (octubre de 2011) de este Informativo del CIDAL (página 6 y ss) con la fecha máxima de entrega del día 5 del corriente mes de diciembre.

Con este instrumento anual procuramos poner al servicio de la Iglesia que peregrina en América Latina, especialmente de los Señores obispos, sacerdotes y diáconos, los cambios que se van produciendo con el correr del tiempo en el ámbito del diaconado permanente y así poder anticiparnos a tiempos futuros. Entre otros aspectos, las encuestas apuntan a registrar tanto su perfil como el de las esposas de los casados, cómo viven, cuáles son sus percepciones en la Iglesia y sus experiencias diaconales, cómo ha sido y cómo es su formación diaconal, cómo se organizan, de qué manera participan en la vida de su Iglesia local, cómo se relacionan con otros diáconos y cuáles son sus sugerencias, desafíos y sueños.

    Una vez que concluya su procesamiento, probablemente hacia fines de este mes (diciembre de 2011), procederemos a publicar su resultado, como lo hicimos con las cuatro anteriores.

La Santa Sede también distribuyó una encuesta sobre los diáconos permanentes

El Cardenal Mauro Piacenza, Prefecto de la Congregación para el Clero, dirigió una carta a fines del mes de septiembre (2011) a las sedes de todos los Ordinarios Diocesanos para pedirles que le remitan antes del 30 de noviembre un análisis de la experiencia local del diaconado permanente, al haberse cumplido cincuenta años de introducido este ministerio en la Iglesia. El propósito de esta consulta, que manifiesta el Señor Prefecto, es la conveniencia de proceder a un examen general  que corresponda a la actual situación de tal realidad.

    Para facilitarles la tarea a los Ordinarios, dicho Prefecto envió también, por si lo consideraran útil, un anexo con unas 32 preguntas relacionadas con el tema y que están distribuidas en nueve bloques.