Ocho nuevos diáconos en la diócesis de Búfalo (EEUU), uno de ellos latinoamericano, junto a otros 7 camino al presbiterado

Bajo la sombra de intensas críticas de la dirección diocesana, una congregación católica de todo el oeste de Nueva York se reunieron en la Virgen de basílica de la victoria en Lackawanna para presenciar la celebración de la ordenación de 15 hombres a la orden del diaconado, el sábado, de septiembre 15

Ocho hombres – Ronald D. ADAMCZAK de Lancaster, David M. Augustyniak de Lewiston, Michael J. Dalessandro de West Seneca, G. Daniel DENECKE de Marilla, Jorge L. Silva de Tonawanda, y Arthur T. Sullivan Jr., Paul F. Walter Jr. y Robert G. Warner, todos East Amherst, fueron ordenados diáconos permanentes por el obispo Richard J. Malone.

Además, Robert A. Contarin de East Aurora, Moisés O. Ikuelogbon de Buffalo, Aaron F. Kulczyk de Batavia, Robert J. Owczarczak de East Aurora, Mario gemar Racho de Filipinas, Patryk G. Sobczyk de Tonawanda y Justin J. Steeg de Westfield fueron ordenados diáconos de transición, preparándolos para el próximo paso en su viaje al sacerdocio.

Antes de la Misa de ordenación, se les pidió a todos los candidatos que se describieran a sí mismos y a su viaje religioso para continuar el ministerio. Diácono Silva, originario de Puerto Rico y ahora casado y con dos hijos.

«Soy un hombre que ama a mi familia y a la Iglesia Católica», dijo el Diácono Silva. «Me encanta trabajar con aquellas personas que han sufrido mucho en su vida, ya que son el Cristo viviente de nuestro tiempo. Estoy seguro de que a pesar de mis imperfecciones y limitaciones, el mismo Jesús que me llamó para que le sirvan, es el mismo alguien que me dará el mensaje «.

«El llamado de Dios al ministerio ordenado comenzó como una idea y un deseo que no desaparecería», dijo el Diácono Steeg. Estoy esperando con ansias a la gente de Dios aquí en el oeste de Nueva York «.

Durante su homilía, el obispo Malone complementa la iglesia y el ministerio de Venerable Nelson Baker, quien encabezó la construcción del hito Lackawanna. Obispo Malone discute el significado de la primera lectura, Jeremías 1: 4-9, que concluye: «Entonces el Señor extendió su mano y tocó mi boca, diciendo: ‘Mira, yo pongo mis palabras en tu boca,!'» Invocando los nuevos diáconos para ser heraldos del Evangelio.

«Agradecemos a Dios por ustedes, queridos hermanos, a cada uno de ustedes, y por decir que sí a esa llamada», dijo el obispo.

La congregación ofreció rondas de aplausos tanto para el obispo, y en particular, los sacerdotes que sirven a la diócesis.

Justo cuando el obispo Malone comenzó la misa, se tomó un momento para «dirigirse al elefante en la habitación, y ese soy yo». Reiteró su llamado a implementar salvaguardias más fuertes en la diócesis y anunció un servicio de oración por sanidad y penitencia a las 3 p.m. Septiembre 30 en la Catedral de San José en el centro de Buffalo.

El obispo Malone citó una carta reciente que lo recibió para no renunciar, mejorar y liderar.

«Admito mi fracaso en la forma en que manejamos los casos recientemente», dijo el obispo. «Lo siento».

El Diácono Kulczyk dijo que aunque sus vocaciones han tenido altibajos, fue la llamada de Dios, incluso en este momento en la Diócesis de Buffalo.

«Mirando mi propio viaje vocacional», dijo. «Sin embargo, ahora, cada vez que pienso en mi propia vocación, pienso en las palabras: ‘Serás necesario’. Religiosos y hermanos, diáconos y sacerdotes en las noticias, necesitamos buenos hombres y mujeres, hermanas y hermanos religiosos, y otros para llevar a otros a Cristo.

Fuente: www.wnycatholic.org

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