Padre, aumenta nuestra fe y nuestra esperanza”
En una nueva Visita Pastoral, Mons. René Rebolledo compartió con fieles de los pueblos rurales ubicados al interior de la comuna de Monte Patria, quienes con ferviente amor comenzaron a vivir el Tiempo de Adviento.
Miercoles 02 de Diciembre del 2015
Cruzando el río Mostazal rumbo al Maitén, último pueblo de ese rincón del Valle del Limarí, el Arzobispo de La Serena, Mons. René Rebolledo, montado a caballo junto al grupo de huasos que lo escoltan llegó hasta la capilla “Ntra. Sra. del Carmen del sector.
“Si bien son pocas las personas que habitan este pueblo, muchos de ellos adultos mayores ya que los más jóvenes viajan a estudiar a Ovalle, son muy fieles y comprometidos con el Señor. En mi camino al diaconado me ha servido mucho acompañarlos, he aprendido bastante lo que me ayuda en mi camino de fe”, indicó Gustavo Castillo, postulante a diácono que acompaña pastoralmente a los fieles del lugar.
De esta forma, se dio inicio a una nueva Visita Pastoral con la cual las comunidades pertenecientes a la parroquia “Ntra. Sra. de las Mercedes” de Carén, manifestaron su fe en el Señor y la esperanza que El Niño Dios nazca en sus corazones, dando por iniciado el Tiempo de Adviento.
Posteriormente, el Pastor Arquidiocesano compartió con los feligreses de la comunidad “Cristo Redentor” de Pampa Grande. Luego de la Eucaristía, la señora Rosa González, conocida en el lugar como Nena, manifestó: “lo más importante que tenemos en este lugar es nuestra fe. Por eso siempre nos reunimos para celebrar el día del Señor y vivir cada una de las festividades. Ahora para Navidad, el pueblo queda prácticamente vacío ya que todas las familias viajamos a saludar a la Virgencita de Andacollo en su fiesta”.
Por la tarde, 18 jóvenes y adultos de la comunidad “Inmaculada Concepción” de Chañaral de Carén recibieron el Sacramento de la Confirmación. La catequesis estuvo a cargo de la reconocida señora Aldecira “chilita” Ilabaca, que además fue madrina de María León, quien destacó: “no pude haber elegido mejor madrina que la chilita. Es una gran persona, correcta y muy respetada, que nos ha entregado grandes enseñanzas que han marcado harto a las personas del pueblo, es como una segunda mamá para mí”.