La diócesis de Cruz del Eje (Argentina) tiene 4 nuevos diáconos permanentes

 Mons. Santiago Olivera, obispo castrense y antiguo obispo de Cruz del Eje, ordenó diáconos permanentes a cuatro padres de familia que completaron su preparación en el Centro de Formación para el Diaconado Permanente San Esteban. Con esta ordenación la diócesis cuenta ahora con 14 diáconos permanentes.

Monseñor Santiago Olivera, obispo castrense y antiguo obispo de Cruz del Eje, ordenó diáconos permanentes a cuatro padres de familia que completaron su preparación en el Centro de Formación para el Diaconado Permanente San Esteban. Con esta ordenación la diócesis cuenta ahora con 14 diáconos permanentes.

La misa de ordenación diaconal, que presidió monseñor Olivera, fue celebrada en la catedral Nuestra Señora del Carmen el lunes 21 de agosto de 2017, y concelebrada por el administrador diocesano presbítero Pedro López; el presbítero Hugo Tiziano Rizzo y demás sacerdotes de la diócesis. También concelebró monseñor Fabián Alejandro Sáenz, vicario general de la diócesis de Merlo-Moreno.

La clave de toda vocación es el amor.
Monseñor Olivera, que gobernó pastoralmente esta diócesis durante los últimos nueve años, comenzó su homilía dando gracias a Dios porque en la diócesis, en poco tiempo, «pudimos experimentar la plenitud del orden sagrado: el 5 de agosto hemos ordenado sacerdote a Juan Manuel Pacheco; hoy ordenamos cuatro diáconos permanentes; y el 7 de octubre próximo, Dios mediante, recibirá la ordenación episcopal y asumirá el gobierno pastoral de la diócesis de Cruz del Eje el nuevo obispo monseñor Hugo Ricardo Araya».

Luego, dirigiéndose a los inminentes diáconos expresó: “La clave de toda vocación es el amor, es decir, es una elección de amor, un Dios que elige y alguien que responde, que son ustedes concretamente. El diaconado es uno, hay un solo diaconado; de modo transitorio, que es camino al sacerdocio, y de modo permanente, que son estos diáconos casados, donde también juegan las familias, las esposas que respondieron, que acompañaron, que dieron su sí».

Los nuevos diáconos permanentes:
Juan Carlos Andrada, puntano de 72 años, nacido en la ciudad de San Luis el 29 de agosto de 1945, casado con Gladys Mabel Maldonado, padres de tres hijos. Ejercerá su ministerio diaconal en la parroquia Nuestra Señora de Schoenstatt, de Villa Dolores.

Cantalicio Alfredo Bobadilla, formoseño de 59 años, nacido en la ciudad de Formosa el 7 de noviembre de 1957, casado con Laura Marisa Carricaburo, padres de cinco hijos. Ejercerá su ministerio diaconal en la parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, de Mina Clavero.

José Manuel García, cordobés de 49 años, nacido en Villa de Soto el 4 de diciembre de 1967, casado con Gloria Silvina Díaz, padres de cuatro hijos. Ejercerá su ministerio diaconal en el santuario y parroquia San Roque, de Villa de Soto.

Raúl Sergio Ramos, cordobés de 56 años, nacido en la ciudad de Córdoba el 26 de marzo de 1961, casado con Marina del Valle Bueno, padres de dos hijos. Ejercerá su ministerio diaconal en la parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, de Mina Clavero.+

Tomado de: aica.org

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *