La comunidad diaconal de la diócesis de Bilbao (España) hace sus ejercicios espirituales

Como todos los años, en torno a la festividad del diácono San Vicente Mártir,  el diaconado permanente de nuestra Diócesis tiene sus ejercicios espirituales. En esta ocasión, se desarrollan a lo largo de cinco jornadas, que comenzaron el viernes día 20 por la noche, en el convento de las Clarisas de Artebakarra, dirigidos por el presbítero Dionisio Larrañaga, formador y director espiritual del Seminario de Bilbao, que acompañará el encuentro ahondando en la identidad y espiritualidad ministeriales, que se desarrollará bajo el título «Servidores de la luz y la verdad».

Actualmente, son siete los diáconos permanentes que desarrollan su labor en nuestra diócesis de Bilbao y sus encomiendas pastorales se ubican en las UPs de Galdakao, San Miguel-Orozko, Txorierri, Casco Viejo, Encartaciones Altas y Astrabudua. La misión que realizan se extiende a la atención al culto en las parroquias, los diversos grupos de Cáritas y Pastoral de la salud, capellanías de hospital y residencias, la pastoral familiar, así como la animación pastoral de grupos juveniles, catequesis y, en términos generales, de iniciación cristiana. Señalemos también, que algunas pastorales emergentes en nuestra Diócesis cuentan con el acompañamiento y consiliaría de nuestros diáconos.

El diaconado permanente surgió en nuestra diócesis hace 13 años como fruto de una reflexión eclesial desde la Asamblea diocesana (1984-1987) y se recogió como tal en el apartado dedicado a los agentes de pastoral: “Dentro de esta preocupación de atención personal a las comunidades cristianas, se pide a los Obispos que estudien la conveniencia de establecer en la Diócesis el Diaconado permanente, siguiendo un adecuado proceso  de selección y formación de candidatos, en el que habrán de intervenir sus propias comunidades”. También el objetivo diocesano general número 8 propuso: “Encomendar a laicos y laicas en tareas y servicios de distinto tipo, y promover los ministerios laicales y el diaconado permanente como respuesta a las necesidades concretas de las comunidades”. Su restauración tuvo lugar en el año 2002, durante el ministerio episcopal de Mons. Ricardo Blázquez. Con el ministerio de Mons. Mario Iceta, se ha promulgado el Directorio diocesano para la formación, ministerio y vida de los diáconos permanentes de nuestra Diócesis.

Este mes de enero los presbíteros diocesanos, así como los miembros del Seminario Diocesano y el Obispo, han participado en diferentes tandas de Ejercicios Espirituales. Ahora le toca el turno al diaconado permanente y en febrero,  será el laicado diocesano quien participe en sus ejercicios anuales.

Tomado de: bizkeliza.org

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