Desde Servir en las periferias, en este día del amor fraterno en el que volvemos al cenáculo para fortalecer nuestro servicio, contemplando el lavatorio del Señor a sus discípulos, renovamos nuestra voluntad de servicio y entrega.
Un abrazo fraterno
SIGUE HABIENDO TANTOS PIES QUE LAVAR
Sigue habiendo tantos pies que lavar
sigue habiendo tanta oscuridad que iluminar
tantas cadenas que romper
pan y vino para el pobre quiero ser.
Sigue habiendo tantos pies que lavar
sigue habiendo tanta oscuridad que iluminar
tantas cadenas que romper
fortalece, Señor, mi poca fe.