Entrevista al presbítero D. Santiago Bohigues,secretario técnico de la Comisión Episcopal del Clero de la Conferencia Episcopal Española

El Informativo Religión Digital entrevista a D. Santiago Bohiques en relación a su responsabilidad como secretario técnico de la Comisión Episcopal del Cleo de la CEE, Recogemos a conituación las preguntas relacionadas con el diaconado permanente, la entrevista completa puede leerse en el link:

http://www.periodistadigital.com/religion/vida-religiosa/2015/04/05/santiago-bohigues-la-iglesia-necesita-tiempo-para-asimilar-el-gran-proyecto-de-francisco-diocesis-religion-sacerdote-religion-iglesia-espana.shtml

El caso de los diáconos tampoco se ha explotado demasiado… y eso que han pasado muchos años del Concilio.

Ciertamente se debe ir conociendo más la figura del diácono. En los últimos años -yo he sido testigo completo- se ha avanzado mucho en la aclaración de las funciones que el diácono permanente tiene que desarrollar. Hay unas normas para la vida y el ministerio de los diáconos que había que revisar, y se ha revisado. Los obispos han actualizado los documentos. Se habló del tema del diaconado en la plenaria desde las experiencias más que desde los documentos. Sin su fuerte realidad, la Iglesia era pobre. Les desperdiciaba. Hubo una etapa en que pusieron al diaconado en la diócesis, y surgieron problemas. Los obispos quisieron buscar juntos soluciones. Gracias a Dios, hace poco se aprobaron nuevas normas y ya esa etapa ha terminado. Los obispos ya tienen claro lo que quieren entorno a esta riqueza. Actualmente, van a más.

¿Cuántos diáconos hay?

Actualmente habrá unos cuatrocientos diáconos ordenados, y casi cien preparándose para la ordenación.

¿También mal distribuidos: hay diócesis que tienen muchos y algunas que no tienen ni uno?

Sí, es verdad. Históricamente, en España la diócesis de Barcelona y la de Sevilla han sido las que más han apostado por el diaconado permanente, y tienen muchos. Ahora hay otras diócesis que van empezando a tener números importantes. Madrid, Valencia y algunas otras más. Valencia tiene 18, creo recordar; Madrid más de 20… Eso depende del obispo, porque él no está obligado a poner el diaconado permanente. Es conveniente, porque es el sacramento de Cristo servidor…

…Pero sobre todo por las circunstancias: si no hay clero, algo hay que hacer.

Pero cuidado, porque a veces vemos al diácono como a un casi sacerdote. Y no es así. El diácono es una riqueza por sí mismo, por su sacramento. Lo suyo es el servicio. La caridad. Hay diáconos dedicados a Cáritas, a la pastoral sanitaria, a la cárcel… y, de repente, un obispo dice que no tiene curas cara enviar a tales pueblos y al diácono -normalmente casado- le toca estar atendiendo a esas parroquias hasta que se pueda enviar a un sacerdote. Eso ya está ocurriendo: va el diácono y hace lo que puede. Hay diáconos que están siendo secretarios de obispos. Ricardo Blázquez, por ejemplo, tiene un secretario que es diácono, Patricio, que lo está haciendo muy bien. Luego, también hay administradores de seminarios que son diáconos; secretarios de comisiones diocesanas… ¿Por qué tienen que ser sacerdotes? A veces cargamos tanto al sacerdote, que al final no puede más.

Pero si el sacerdote ya no están, si no quedan… ¿esa gente no es una salida? Habría más vocaciones situando a los diáconos en estos cargos.

Sí, pero queremos más pastoral vocacional. Una Iglesia viva es una Iglesia en la que florecen todos los carismas. Tiene que haber matrimonios, religiosos, diáconos y sacerdotes. Lo normal tiene que ser eso y, si no se da, algo falla.

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