Crece el diaconado permanente en Cruz del Eje

El viernes 1º de mayo dos esposos y padres de familia recibirán en la catedral de Nuestra Señora del Carmen, iglesia mayor de la diócesis de Cruz del Eje, el orden del diaconado, que ejercerán de modo permanente sirviendo a la caridad en sus comunidades. 

Los futuros diáconos permanentes recibirán la ordenación de manos del obispo diocesano, monseñor Santiago Olivera. Los ordenandos son Walter Mattos, un técnico mecánico que vive en La Cumbre, y Fernando Falón, docente y vecino de Cruz del Eje. 

Mattos está casado con Elsa y tienen cuatro hijos, mientras que Falón está casado con Deborah y tienen un hijo. Con estos dos serán nueve los diáconos de la diócesis de Cruz del Eje. A su vez, el Instituto San Esteban recibe cotidianamente a cuatro varones que se están preparando para este servicio desinteresado a Jesús y a su Iglesia. 

La opción por el diaconado
A partir del Concilio Vaticano II, la Iglesia redescubrió la misión del diácono. Estos ministros del orden sagrado desempeñan un servicio evangelizador con la Palabra, un servicio santificador en el culto litúrgico y un servicio de ayuda fraterna en la caridad. El orden del diaconado puede ser conferido a hombres casados o célibes. 

En el caso de los casados, suele llamarse “diaconado permanente” a su ministerio por cuanto no tienen en su horizonte continuar progresando hacia la ordenación sacerdotal. 

Para el diácono permanente, este ministerio es su vocación específica para la Iglesia y para el mundo. No es una forma de suplir la falta o carencia de vocaciones sacerdotales, sino una vocación con identidad propia.



En la diócesis de Cruz del Eje, el obispo Santiago Olivera creó en 2009 un instituto de formación para el diaconado permanente, que tiene como patrono al diácono san Esteban, el primer mártir de la Iglesia primitiva. En esta escuela se preparan candidatos para recibir el ministerio del diaconado de acuerdo al plan aprobado por la Conferencia Episcopal Argentina. 

Las esposas de los candidatos y diáconos participan periódicamente en la formación y se organizan reuniones familiares para el encuentro fraterno. En los últimos dos años fueron ordenados cinco diáconos permanentes de diferentes puntos de la diócesis.

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