Hacia una Iglesia en salida es el título del Plan global 2015-2019 del Consejo Episcopal latinoamericano. Se trata de un estilo de Iglesia con abundantes ingredientes evangélicos emanados de la visión del papa Francisco. Es más, una Iglesia que quiere hacerse Evangelio, una Iglesia que quiere superar la «elefantitis». Es decir siendo una Iglesia conformada por una estructura humana de 1,254 millones de católicos en el mundo, tiende a convertirse en un cuerpo que se mueve lento o que no se mueve. La variedad de estilos, que no siempre son carismas sino criterios internos, conforman un mosaico, algunos con más peso y otros con menos peso, unos más apegados al Evangelio y otros menos, unos más comprometidos en la construcción del Reino de Dios y otros en la construcción de sus propios reinos.
Pero la Iglesia cuenta también con un enorme número de organismos que apegados al Reino podrían transformar verdaderamente el mundo y que van desde estructuras diocesanas, pasando por órdenes religiosas hasta organizaciones laicales. El estilo de finca o hacienda proveniente de la edad media ha marcado no solo la iglesia sino a las sociedades.
La Evangelii Gaudium, o la alegría del Evangelio, sobre el anuncio del Evangelio en el mundo actual, fue la exhortación con la que el papa Francisco hizo un llamado y marcó la ruta a seguir. Para que la Iglesia que como se dice, normalmente llega tarde en el ritmo de los cambios históricos, pueda actualizarse a la realidad del mundo de hoy, y pueda ser servidora del Reino.
El Papa entró irrumpiendo en un ambiente eclesial, cansado y un poco lleno de telarañas acumuladas por el cansancio de los siglos a lo largo de dos milenios. Una Iglesia embestida por los cambios de todo tipo que van sufriendo las mismas sociedades, en las que se podía constatar una cierta pesadez.
En “la alegría del Evangelio”, el Papa en las primeras líneas dijo a todos los cristianos y sociedades del mundo: “La alegría del Evangelio llena el corazón y la vida entera de los que se encuentran con Jesús. Quienes se dejan salvar por Él son liberados del pecado, de la tristeza, del vacío interior, del aislamiento. Con Jesucristo siempre nace y renace la alegría. En esta Exhortación quiero dirigirme a los fieles cristianos para invitarlos a una nueva etapa evangelizadora marcada por esa alegría, e indicar caminos para la marcha de la Iglesia en los próximos años.”
Así trazó el Papa el camino en esta etapa de la historia. Pensamos por tanto en el soplo del Espíritu de Dios en la Iglesia, como aquel día en el que san Juan XXIII, recibiera el aire fresco al abrir la ventana de su habitación concluyendo que “la Iglesia necesita aire fresco oxigenado para superar el ahogamiento”, convocando así al concilio Vaticano II.
El CELAM que es un organismo de comunión eclesial de América Latina hacia adentro, y hacia la Iglesia universal junto al Papa, quiere esforzarse por conservar la frescura del Evangelio, porque sin él se convierte en una estructura humana vacía y sin espíritu.
El Plan Global refleja el esfuerzo del Espíritu y compromiso evangélico que el CELAM recoge de las comunidades cristianas y de los pastores de américa latina y el Caribe, a lo largo de los 60 años de su existencia (El CELAM ha cumplido 60 años) convirtiéndolo en su ruta de trabajo para estos cuatro años que recién han iniciado.
Dedicaremos un espacio especial a socializar el Plan de los próximos 4 años del CELAM, invitando a todos a acercarse y profundizar su contenido. EL CELAM es una riqueza enorme de América Latina y el Caribe. Nos ayuda a tener una visión regional como dijera san Juan Pablo II, como Continente de la Esperanza.
La idea es conocer el Plan pastoral eclesial del CELAM elaborado para los próximos 4 años, para que podamos ser parte de las líneas que se trazan para este periodo, para que confraternicemos como Iglesia latinoamericana y caribeña, y para que como dijera el experto en espiritualidad cristiana el padre Gustavo Gutiérrez: “bebamos del propio pozo”, es decir de ese rico cúmulo de eclesialidad, historia, espiritualidad y pastoral, acumulado en esta región de “los confines del mundo”.
Nos centramos ahora en el Objetivo general de este Plan pastoral para que lo deshilemos, lo analicemos y descubramos la carnosidad del Evangelio, ruta de la vida eterna y con la que podremos construir mejores sociedades.
El mismo plan indica que el propósito del plan global del CELAM 2015-2019 se traza en el objetivo general:
Promover en comunión con las conferencias episcopales de América latina y El Caribe, bajo la guía del Espíritu Santo, una Iglesia misionera en salida, pobre para los pobres, mediante su conversión pastoral en diálogo con el mundo, para anunciar con alegría a Jesucristo, vida plena para todos los pueblos.
Pueden consultar el texto del Plan Global en el siguiente link del CELAM:
http://www.celam.org/Plan_Global_y_Programas_2015-2019.pdf
Autor: Noticelam
Fuente: CELAM